
Welcome to the Freak Show no es un fix-up ni una antología al uso. Es la puerta a un universo en el que sólo tienen cabida emociones y pasiones en estado puro. En el que la magia y la realidad van de la mano. Y en el que, incluso los peores actos, deben ser medidos con valores diferentes ya que, conceptos como el bien o el mal, no son aplicables a sus habitantes.