En un futuro no tan lejano, los seres humanos han alcanzado una de sus mayores metas, la inmortalidad. Y lo han hecho a manos de una ciencia que a su vez ha logrado crear unos seres vivos semejantes a ellos llamados “Bioingenios”. Pero este don adquirido por su propia inteligencia cambia a una humanidad que ahora estéril, falta de motivación, metas o urgencia, se estanca tecnológicamente y puede que incluso comience a involucionar moralmente.
El relato, narrado en tercera persona, se centra en Ray, uno de esos bioingenios que ignora su propia condición hasta que sufre un accidente y fallece. Tras esto toma consciencia de su naturaleza; su mirada cambia al igual que su percepción de los que creía sus congéneres y que ahora le repudian y le envían a luchar a “las guerras infinitas» para que pierda las dos vidas que le quedan y fallezca irremediablemente.
Mediante oportunos flashbacks, el autor nos va trazando las pinceladas necesarias que nos hagan comprender a Ray, a sus padres y a su mundo. Desarrolla una historia de dos capas; la previsible aventura repleta de acción de principio a fin y una segunda, construida a medias con el lector, en la que logra que empaticemos con el protagonista al advertir en esas guerras que dan título al relato, el máximo exponente de la degradación moral de una sociedad fascinada por la muerte y donde el rechazo a los que son diferentes nos recuerda tanto a la xenofobia tan tristemente actual como a la teoría del «valle inquietante»*.
El talento de Oliva Ostos es sorprendente; con una prosa elaborada pero fluida y de mayor calidad a lo esperable en un relato de apenas 40 páginas con vocación Pulp, consigue entretenernos, generar un mundo creíble y comprensible sin extenderse más allá de lo necesario (ni dejar la impresión de un worldbuilding incompleto) y darnos algo en que pensar; un enfrentamiento inevitable entre unos seres sumidos en la apatía y otros con muchas ganas de vivir pero condenados morir bajo su yugo. Además, mediante varios guiños y menciones, esta historia es un homenaje en sí mismo a la literatura de Ciencia Ficción con mayúsculas.
*El valle inquietante: hipótesis en el campo de la robótica y animación por computadora en 3D que afirma que cuando las réplicas antropomórficas se acercan en exceso a la apariencia y comportamiento de un ser humano real, causan una respuesta de rechazo entre los observadores.