Nistagmo: Oscilación espasmódica del globo ocular alrededor de su eje horizontal o de su eje vertical, producida por determinados movimientos de la cabeza o del cuerpo y reveladora de ciertas alteraciones patológicas del sistema nervioso o del oído interno.
Corremos el riesgo de ser devorados por nuestro propio futuro. Si no corregimos la deriva de este presente cada vez más supeditado a la economía, los seres humanos del mañana no tendrán ningún valor. El sistema seguirá apretando la tuerca, vendiéndonos como futuro y prosperidad lo que puede no ser más que un modelo de esclavitud a bajo coste. Y nosotros no lo veremos, como no lo vemos ahora; seguiremos culpando al de al lado, al que trabaja por menos dinero sin importarnos el motivo que le empuja a hacerlo. Le señalaremos a él, no a quien le ofrece un sueldo indigno aprovechándose de la necesidad. Le identificaremos por su acento, por el color de su piel, o por el extraño movimiento de sus ojos. Y entonces le odiaremos.
En un futuro no muy lejano donde se alcanzan temperaturas de 60°C, Simón Ariza es un hombre feliz. Su vida no es muy diferente a la de muchas personas de hoy en día: casado, padre de tres hijos, y con un trabajo estable de oficina, puede considerarse afortunado. Sin embargo, siente que su vida mejoraría si fuese capaz de dedicar más tiempo a la escultura (su gran afición), o si estudiase todas aquellas materias que siempre le atrajeron. Su experiencia vital sería aún más plena. Por eso, cuando StarPro Energy le ofrece participar en un estudio sobre un implante que le libraría de la necesidad de dormir, no duda en aceptar. Esas ocho horas extra al día, ocho horas de libertad, podrían proporcionarle la oportunidad de realizar todo lo que se propusiese, de vivir más, o de ganar más dinero… pero a veces los caminos opuestos se parecen demasiado.
Esta novela corta, mención del acta del jurado del Premio UPC 2018, se centra en su protagonista. Él mismo nos cuenta, en primera persona, quién es. Nos habla de sus rarezas, de sus inquietudes, e incluso de su aversión (y curiosidad) hacia los ‘todoterreno’: hombres y mujeres cuyos ojos se mueven sin cesar y que aceptan cualquier tipo de trabajo a cambio de sueldos humillantes. De este modo, cada una de sus sensaciones y de sus sentimientos pasan a ser los del lector, espectador rendido ante el buen corazón de Simón y la preciosa relación que este mantiene con su esposa e hijos. Todo lo demás queda en segundo plano. El autor no nos habla de la situación global de un planeta sobrecalentado, ni de su tecnología, cultura, o peculiaridades. Puede que ese sea el único punto flaco de una historia ágil, comprometida e intrigante que, a pesar de resolverse con solvencia, deja con ganas de más.
¿Si pudieseis prescindir del sueño, querríais hacerlo? ¿De ser así, en qué emplearíais vuestro tiempo libre? ¿Y cuál es el precio que estaríais dispuestos a pagar por ese don? Si no tenéis una respuesta clara, acompañad a Bruno Puelles en este viaje al futuro. Tal vez descubráis quienes son los todoterreno, que les impulsa a trabajar como esclavos y, sobre todo, por qué desaparecen sin dejar rastro. Aunque también es posible que no os interese conocer la verdad y simplemente prefiráis odiarles por destruir el equilibrio del mercado laboral. Tened cuidado: si elegís ese camino, cuando os percataréis de que solo somos piezas prescindibles en un sistema que busca abaratar costes, será demasiado tarde. Pero estad atentos: sea cual sea vuestra decisión, no dejéis de observar los ojos de quienes os rodean.