Cristina Monteoliva tiene la habilidad de introducir al lector en el argumento para dejar el tema de repente y pasar a otro asunto. Hasta el final no nos percatamos realmente de lo sucedido, cuando la autora cierra, de una manera fantástica y sorprendente, el prólogo con un epílogo digno de este género, en el que lo maravilloso impide el funcionamiento racional del mundo y se explica sin ningún tipo de restricciones.
Publicaciones Similares
Coincidencias – Rosa Montero
En este librito, formado por tres relatos, vemos la esencia…
Acerca del alma – Aristóteles
El concepto “alma” ha supuesto un enigma para mí durante…
Carta a una señorita en París – Julio Cortazar
Ocho cuentos por los que no ha pasado el tiempo….
Las hermanas Jacobs – Benjamin Black
No había leído nada de Benjamin Black y después de…
Yerro – Estela Melero Bermejo
La última novela de Estela Melero Bermejo es íntima, puede…
Tres enigmas para la Organización
Cuando la realidad sale a la luz en un conjunto…