Una vez superados los reparos que me provocaba el título, he de decir que la novela me ha encantado. El autor, además de construir una trama perfecta, hace de ángel para que su ya mítico personaje Harry Hole, sobreviva a todas las mortales situaciones a las que se enfrenta a fin de que pueda hacerse cargo de un nuevo caso.
Intereses políticos, miseria, pederastia… y mucho más se mezclan con estos repugnantes insectos.